COMBATIR EL ESTRÉS LABORAL
Para mejorar mi bienestar
Libérate del estrés laboral
Acompaño personas superadas por el estrés diario, generado por las altas exigencias en el entorno laboral, a sentirse en un estado relajado.
Creando un espacio donde recuperar el equilibrio saludable de nuestro cuerpo a través de la música, el movimiento y el grupo. Estas herramientas facilitan la expresión de nuestra propia identidad generando así un mayor bienestar: liberándonos de las cargas y las tensiones que llevamos, de la rigidez, del agotamiento físico y mental, de los dolores de cabeza y de las preocupaciones, restableciendo nuestro ciclo de sueño.
Con la práctica de la biodanza despertamos rápidamente nuestra alegría de vivir, rescatamos nuestra fluidez ante las situaciones cotidianas, la armonía corporal y emocional, la regulación de la tensión arterial y el ritmo natural de nuestro organismo en su totalidad. Desarrollamos la capacidad de estar en el aquí y el ahora. Nos induce a volver a escuchar nuestro cuerpo y los mensajes que éste nos transmite para que actuemos, en cada momento, en coherencia con aquello que sentimos, pensamos y hacemos: favoreciendo así nuestra salud.
¿Para quién?
Me siento agotad@ física y mentalmente!
Mi mente está saturada: el trabajo, la casa, los pagos, la familia... Hasta la memoria me falla.
Casi cada día me duele la cabeza
Las preocupaciones se acumulan y al dolor cabeza le cuesta desaparecer.
Mi tensión arterial no se estabiliza
Voy tan acelerad@ que ya no sé cómo parar. Mi tensión no se regula, tanto la tengo alta como baja.
Mis músculos están tensos
Mi espalda acumula muchas tensiones: hombros, escápulas, brazos, cara, lumbares...
¿Qué me aporta?
Aprendiendo a escuchar nuestro cuerpo.
Invitamos a nuestro cuerpo a recuperar la presencia, a volver a habitarlo, a salir de la mente y equilibrar ambos hemisferios cerebrales.
Nos liberamos de las cargas y tensiones.
Los ejercicios nos facilitan la liberación de cargas mentales, emocionales y musculares.
Aprendemos a autorregularnos en cada vivencia
La vivencia nos aporta un equilibrio entre la vitalidad y el descanso, que vamos aprendiendo a escuchar.
Re- Conectamos con la alegría de vivir.
Las vivencias individuales y grupales nos permite expresar nuestra parte más saludable, conectando con la alegría de vivir y una motivación de vida.
¿Cómo lo haremos?
Recuperando nuestra armonía biológica
Bajando la hiperactividad para reducir la hormona del estrés, el cortisol y poder facilitar la generación de sus hormonas antagonistas que nos regenera y nos hace sentir bien (la serotonina y la dopamina).
La estructura de la propuesta de biodanza estimula el sistema circulatorio, el respiratorio, el endocrino, el inmunológico y el neurovegetativo (Sistema nervioso simpático y el parasimpático.
Regular nuestro ritmo vital
Desarrollando la propia escucha y a la autorregulación, a descubrir cuál es el ritmo más armonioso para nuestra vida, a movernos en distintos ritmos y así aumentar nuestra plasticidad cerebral. Con propuestas motoras, de juegos, de fluidez…
El corazón marca nuestro ritmo cada momento como un engranaje perfecto según las exigencias externas. Por eso es importante incidir sobre el ritmo, para llegar a un buen equilibrio. El ritmo constituye la característica fundamental de los movimientos vitales: el corazón, la respiración y del caminar.
Mejorando nuestro bienestar general
Mejoramos nuestra relación con nosotr@s mism@s, con la familia y con nuestro entorno. Aumentamos nuestras capacidades de: comunicación afectiva, potencia vital, regular nuestra actividad y descanso, estar presentes con apertura a fluir con la vida y elevamos nuestra motivación de vivir.
Una sana comunicación con escucha activa, empatía y con asertividad y sin juicios, es una buena base para sentirnos bien con nosotras mismas y generar un entorno más saludable a nuestro alrededor.
Conectando con la alegría de vivir
La alegría nos da el impulso necesario para la acción y nos abre la mirada a la posibilidad de tener nuevas experiencias y aprendizajes. La vitalidad y la creatividad nos reconecta con esos momentos de libertad de nuestra infancia y nos da el permiso de experimentar y a hacer las cosas de otra manera. La creatividad en nuestra vida nos hace más libres.
A través de las propuestas de ejercicios, los juegos, la música y el grupo. Nos abre la posibilidad a incorporar y la capacidad de disfrutar de nuevo los placeres diarios.